LA IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN TEOLÓGICA EN LA FORMACIÓN
DEL OBRERO Y PARA EL PLENO EJERCICIO DEL MINISTERIO CRISTIANO
Introducción
La Teología, desde los primeros intentos y acciones de los padres de la Iglesia
en expandir conceptos, la sistematización en la edad Media, pasando por su papel
fundamental en la Reforma Protestante, por su importancia en los Grandes
Despertares, y para el actual Movimiento Pentecostal, continua contribuyendo de
una manera bastante relevante para el desenvolvimiento del ser, saber, convivir
y hacer cristianos, en su dimensión, profundidad, esencia y propósito.
1 – Definición de Teología
Teología es la ciencia
de Dios y de las relaciones entre Dios y el universo. El término se deriva del griego
θεóς, trad. theos = "divinidad"
+ λóγος, logos = "palabra",
por extensión, "estudio, análisis, consideración, discurso sobre alguna cosa
o algo".
2 – Objetivo de la Teología
El objetivo de la Teología es la confirmación de los hechos que hablan con
respecto a Dios, las relaciones entre Dios y el universo, y la presentación de
los referidos hechos en una unidad racional, por medio de un sistema elaborado.
3 – Posibilidad de la Teología
El estudio teológico es posible en razón:
- De la existencia de un Dios que interactúa y se relaciona con su creación
- En la capacidad cognitiva de la mente humana de conocer a Dios y algunas
de las tales relaciones (Sl 34.8)
- En la provisión de medios por los cuales Dios se coloca en contacto real con
la mente, ósea, por revelación (Jr 24.7; Ef 1.18)
4 – Necesidad de la Teología
La necesidad de la Teología se basa:
- En el instinto organizador de la mente humana, que no soporta convivir en
confusión o aparente contradicción de los hechos conocidos, buscando siempre la
armonización y unificación de los conocimientos adquiridos por medio de la reflexión
crítica.
- En el desenvolvimiento del carácter cristiano. Cuanta más firmeza y
seguridad doctrinaria, más piadoso, íntegro y firme será el carácter humano
(ética). El saber (epistemología) se manifiesta concretamente en el ser
(ontología) y en el hacer (praxis).
Testimonio implica el decir y proceder de acuerdo con lo que se dice.
- En la importancia de fundamentos bíblicos y doctrinarios bien definidos
para el predicador y enseñador cristiano, que tiene la responsabilidad de
manejar bien la palabra de verdad (2 Tm 2.15), la espada del Espíritu (Ef 6.17).
En el manejo correcto están implícitos los principios que nortean la
interpretación y la exposición bíblica (Hermenéutica e Homilética)
- En la propagación del Evangelio, mediante el análisis de estrategias y
métodos adecuados, fundamentados en estudios bíblicos, sociológicos y
antropológicos, así como en la comisión y dirección del Espíritu (Hechos 13.1-4ss; 16.6-10)
5 – Divisiones de la Teología
Básicamente la Teología se divide en:
- Teología Bíblica: Tiene como meta el orden y clasificación de los hechos
revelados limitándose a las Escrituras como su material y tratando la doctrina
únicamente en la medida en que ella se desenvolvió hasta el fin de la era
apostólica.
- Teología Histórica: Muestra el desenvolvimiento de las doctrinas
bíblicas desde el tiempo de los apóstoles hasta nuestros días y nos demuestra los
resultados o implicaciones de este desenvolvimiento en la vida de la iglesia.
- Teología Sistemática: Se
apropia del material provisto por las Teologías Bíblica e Histórica, y
poseyendo este material, busca construir un edificio doctrinario orgánico,
conexo y consistente de nuestro conocimiento de Dios y de sus relaciones con la
totalidad de su creación natural y espiritual.
- Teología Práctica: Se trata de
un sistema de verdades que sirve como medio de renovación y santificación del
hombre, así como de la búsqueda por una práctica cristiana y eclesial
transformadora y bíblica. Se puede incluir aquí la Homilética, la Teología
Pastoral, la Ética Cristiana, la Liturgia y Culto Cristiano, etc.
6 – Requisitos para el Estudio de la
Teología
El estudio teológico requiere:
- Disciplina mental, que implica paciencia en la colecta de datos, hechos, continua reflexión para juzgamiento final y conclusiones
a la luz de las Sagradas Escrituras.
- Conocimientos generales mediante interacción con las ciencias físicas,
mentales, morales y demás.
- Conocimiento de las lenguas originales de la Biblia (hebreo, arameo y griego)
- Temor a Dios (Sl 25.14; Rm 12.2)
- Iluminación del Espíritu (1 Co
2.11-12)
“Para el estudiante no hay ningún
camino privilegiado que conduzca a la verdad; el único es el mismo del inculto;
es el de la regeneración y de la gradual iluminación a través del Espíritu
Santo; sin él, la teología no es solo una piedra fría, sino también un peligroso
veneno”. (Prof. Beck de Tübingen)
Referencia Bibliográfica:
STRONG, Augustus H. Teologia
Sistemática. São Paulo: Editora Teológica, 2002. V. I
Altair Germano – 1º Vice-Presidente da IEADALPE, Vice-Presidente
del Consejo de Educación y Cultura de la CGADB, Miembro del Directorio
Administrativo de la Sociedad Bíblica de Brasil, es licenciado en Pedagogía,
posee especialización en Educación Cristiana y Psicopedagogía, Magister en Teología
con especialización en Ministerio y Liderazgo, es conferencista y escritor.
Tradução: Adriana Jeaneth Riofrio Palácios
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